Con el propósito de dar cumplimiento a las diversas normativas medioambientales, muchos de los sistemas de propulsión actuales, han empezado a utilizar combustibles alternativos, ya que estos se caracterizan por ser más limpios y contribuir a la menor emisión de emisiones contaminantes. Partiendo de lo anterior, se ha utilizado un motor de dos tiempos empleado para aeromodelismo, para evaluar las prestaciones (empuje y consumo específico de combustible), y niveles de emisiones contaminantes (monóxido de carbono, dióxido de carbono e hidrocarburos), a diferentes regímenes de giro y grados de carga, poniendo a prueba mezclas de etanol con combustible convencional, hasta en una proporción de 30% en volumen. Los resultados presentan que es posible disminuir notablemente el contenido de monóxido de carbono y de los hidrocarburos al incrementar el etano en las mezclas; esta reducción se dio en un 37%, 22% y 10%, para las condiciones de baja, media y alta carga, respectivamente, en comparación con una gasolina comercial (E10), para ambos contaminantes. En cuanto a las prestaciones, los resultados indican que es posible mantener en valores aceptables el empuje sin aumentar de forma importante el consumo de combustible, lo cual indicaría ser una buena alternativa, para reducir el uso excesivo de los combustibles de origen fósil.